En defensa propia: Israel estado de derecho acosado por el terrorismo

Es un hecho, después de la declaración institucional desde Moncloa de 8 de septiembre de 2025, que el gobierno de Pedro Sánchez no es favorable a la causa de Israel, que se defiende de Hamás en Palestina; organización terrorista, como ETA, responsable de la matanza indiscriminada de personas inocentes que solo deseaban vivir en paz.

En la mañana del 7 de octubre de 2023, cuando el mundo judío se disponía a celebrar el final del Sucot, Hamás inició un ataque masivo sobre Israel - Operación Inundación Al-Aqsa - lanzando una lluvia de 5000 misiles que aterrorizó a la población. Dos mil terroristas de Hamás entraron en territorio israelí sembrando el pánico en localidades cercanas cometiendo todo tipo de aberraciones entre las que se incluyen amputaciones, violaciones masivas o decapitación de bebés. Un total de 1400 personas pertenecientes a 19 nacionalidades fueron cruelmente asesinadas en las 24 horas en las que Hamás tuvo el control de estas ciudades del sur de Israel. Además de estos asesinatos, los terroristas de Hamás raptaron a 251 personas de las cuales, 105 fueron intercambiados por presos palestinos en noviembre, 8 han sido liberados por fuerzas israelíes y 42 han muerto durante su cautiverio. De estos 42, al menos 6 han sido cruelmente asesinados por Hamás cuando veían avanzar las fuerzas de Israel por los túneles de Gaza. Actualmente se calcula que 97 rehenes siguen con vida en Gaza.

El Presidente Sánchez se posiciona a favor de la Palestina controlada por el terrorismo de Hamás, menospreciando Israel país amigo de España, donde conviven cerca de un 21% de Arabes (entre ellos 17% de Palestinos) junto con un 76% de población Judía.

Cuando en España hubo el cruel atentado del 11M, Israel nos mandó ayuda de todo tipo, mientras desde Gaza, Hamás brindaba por los muertos de nuestro País, quemando la bandera de España; celebraban así la matanza de Atocha.

No se puede acceder al chantaje de terroristas, aunque Pedro Sánchez los blanquee, la realidad es que Israel, víctima, es un estado soberano el cual en legítima defensa ha decidido terminar con el hostigamiento que viene sufriendo durante años por parte del terrorismo yihadista, haciéndoles frente en un conflicto que, por el bien de todos, especialmente por los inocentes que no han podido escapar de las zonas de enfrentamiento armado, debe terminar en una negociación donde todas las partes implicadas deberán ceder en sus pretensiones, alcanzando un acuerdo justo que garantice la paz.